Un texto de Carmen Haro y Fran Gallardo:
“Muchas noches, todavía sueño que estoy aquí, trabajando”, dice la cigarrera desde el interior de la antigua Fábrica de Tabacos de Madrid. Después, silencio. Unos segundos que me llevan a imaginar el material de esos sueños. Imágenes de pitillos furtivos en los baños, carreras para llegar la primera a la ducha, el rostro de las Maestras que la registraban a la entrada y salida de su puesto de trabajo. Seguro que más de una noche se despierta sobresaltada pensando que llega tarde, y que puede perder la jornada de ese día; y en sueños, todavía respirará el espeso ambiente del tabaco, y lo sentirá impregnado en su pelo, y en su ropa. También sonreirá dormida cuando reviva las risas y el jolgorio en los vestuarios, y se agitará en la cama cuando sean la indignación y los gritos de las manifestaciones. Es posible que envuelva la puntas de sus dedos con la sábana, imitando ese gesto repetitivo que le protegía las uñas. Y más de una noche volverá a recorrer las salas cuando ya todo el mundo se había ido, y se sentará en la mesa junto a aquellas últimas cigarreras, a jugar a las cartas y a sostenerse, las unas a las otras, en los días previos al desalojo definitivo.
Eran los últimos meses del año 2000, la Tabacalera ya era propiedad de Altadis y la fábrica que había sido durante dos siglos, el escenario vital de miles de trabajadoras de Madrid, pasaba a ser propiedad del Ministerio de Cultura y cerraba sus puertas hasta nuevo aviso. Las cigarreras contemporáneas se encontraban con 40, 50 y 60 años frente a un ERE que las domesticaba, que les devolvía al trabajo alternativo, al hogar. Desde entonces, han pasado 10 años en los que la fábrica volvía una y otra vez en conversaciones con sus excompañeras, y se repetía en sueños porque, pese a todos los abusos de clase y género, en el interior de esos muros vivieron los mejores años de su vida. “Y daría cualquier cosa por poder volver, aunque sólo fuera un día, a esa época”.
Ahora, por un solo día, vamos a revivir un pedazo de la existencia de estas mujeres. Sobre el escenario, las antiguas trabajadoras de la Tabacalera de Lavapiés. Sus voces interferidas por el sonido de la fábrica abandonada y por la música de la época interpretada por la cupletista Julia de Castro. Sus cuerpos en sintonía con Les filles Föllen. Un recorrido por la memoria y “un diálogo creativo con un edificio en estado de abandono, que alberga aún las marcas de quienes lo habitaron, lo hicieron suyo, lo lucharon y lo padecieron”. Así definen dos de sus impulsores, David Rodríguez y Rafael Esteban, la obra “Cigarreras. Métodos y tiempos” que se estrena el próximo 19 de febrero dentro del XI Festival Escena Contemporánea.
CSA La Tabacalera de Lavapiés
El 8 de junio de 2010, la Dirección General de Bellas Artes y Bienes Culturales firmaba un contrato histórico con la Asociación SCCPP (Saboteo Contra el Capital Pasándoselo Pipa), para la puesta en marcha de un Centro Social Autogestionado en el edificio de la antigua Fábrica de Tabacos de Madrid. Cuatro días después, con la apertura al público de los 8.000 m2 disponibles del edificio, se inauguraba un proyecto pionero en España, un laboratorio de experimentación social, política y cultural, el CSA La Tabacalera de Lavapiés. Vecinas, artistas y activistas rescataban un edificio en estado de abandono para las gentes del barrio, y de la ciudad. Y en ese proceso de recuperación, la memoria de sus antiguas moradoras se ha erigido como un punto esencial en el marco del proyecto general.
Entre las distintas acciones iniciadas en esta línea, se encuentra el estreno de la obra “Cigarreras. Métodos y tiempos” el próximo 19 de febrero dentro del XI Festival Escena Contemporánea. La idea y dirección es de David Rodríguez, y participan las antiguas trabajadoras de la Fábrica de Tabacos de Madrid, Juan Carlos Ballesteros, Claudia Claremi, De la Puríssima: Julia de Castro y Miguel Rodrigáñez, Les filles Föllen y el colectivo CSA La Tabacalera de Lavapiés.
Cigarreras. Métodos y tiempos.
Lugar: Antigua fábrica de tabacos de Lavapiés (Madrid)
Año de producción: 2011
19 de febrero a las 12 h. Acceso libre hasta completar el aforo.
Estreno absoluto