¡Por fin! ha llegado el momento de hacer una convocatoria para crear un grupo que se encargue de acondicionar el espacio de la Tabacalera: será el sábado 13 de marzo 2010 a las 16:00 en LA TABACALERA de Lavapiés (entrada central desde calle Embajadores, Metro Embajadores).
Tras la reunión con el Ministerio de Cultura del día 3 de marzo tenemos acceso libre al edificio para comenzar a organizar los grupos que tienen más urgencia por intervenir, dando en puerta los DNIs, así que se ruega puntualidad, para que este trámite no eternice el comienzo de la reunión.
A lo largo de la semana esperamos poder hacer una visita con la gerencia del ministerio que determinará la manera de ejecutar la fase1 (*): las primeras obras que garanticen una entrada segura (concretamente si las realizan ellos o nosotras, con qué presupuesto y en qué tiempos).
- Fase 1 (2-3 semanas): se centraría en los trabajos de acondicionamiento de seguridad, con un acceso “restringido”, sin actividad pública y que sería el tiempo de organización inicial en grupos de trabajo que preparen y piensen la fase 2
- Fase 2 (2-3 semanas): acondicionamiento colectivo del espacio y sesiones, talleres y reuniones de discusión y diseño de las líneas principales de definición del funcionamiento, ordenación y gestión del espacio. Entendemos que esto va a ser un proceso permanente, pues uno de los objetivos del “experimento” es tratar de diseñar un modelo participado de gestión democrática de la producción social, política y cultural, sobre el valor de lo común y la cooperación. Pero se trata, en esta fase, de establecer las bases mínimas de funcionamiento así como las líneas de interés a trabajar a medio-largo plazo. Las decisiones serán, por tanto, revisables, en la medida en que experimentemos en la práctica su acierto o error.
- Fase 3: Apertura con actividad pública. A partir de este momento, el acceso será público, se generará programación y se pondrá en marcha la maquinaria experimental de funcionamiento. Calculamos mediados-finales de abril. Estos plazos están pendientes de los acuerdos con gerencia (ver acta reunión con ministerio) pero esperamos se puedan cumplir mayoritariamente.
Situación de partida:
Hasta ahora el trabajo realizado ha consistido en elaborar documentos básicos (planos, fotografías, textos) que describen el estado actual de la zona cedida, las medidas básicas (y mucho) a tomar para una entrada segura, un avance de plan de evacuación, así como un análisis de usos y circulaciones que ha derivado en una solicitud de ampliación de espacio y accesos (cuya aceptación está sujeta a la visita mencionada).
El grupo que está elaborando este pseudo-informe se constituyó de manera informal a raíz de las últimas visitas a la Tabacalera. No se hizo convocatoria masiva porque en aquél momento no había garantías de éxito en la negociación y parecía oportuno allanar el camino entre unas pocas por lo concreto del cometido. La mayoría de esas pocas somos arquitectas que colaboramos en el patio maravillas “2” en la nueva etapa de pez,21 con una experiencia de lo más gratificante 😀
A partir de ahora:
A corto plazo, el primer objetivo es conseguir un plan de actuación concreto e inmediato para la ejecución de las primeras obras de la fase1.
A medio plazo, empezar a imaginar los retos de la fase2: ¿qué significa acondicionar colectivamente un espacio? ¿cómo se diseña, se ejecuta y se mantiene desde un grupo –deseamos- muy numeroso?¿cómo se maneja el presupuesto tanto del ministerio como de la futura autogestión? ¿cómo podemos llevar a la realidad reivindicaciones de otras maneras de solucionar (qué materiales, energías, técnicas constructivas…)? ¿cómo garantizamos la horizontalidad en toda la cadena (electricistas, diseñadores, inventoras, fontaneros, arquitectas, albañilas, supermanitas, urbanistas, jardineras, restauradores, apañaos, técnicas, gestoras, delineantes, jubilados –grupo social con mucha opinión en obras en general-, estudiantes, jefas de obra, soldadoras, ingenieros, ingeniosas…) manteniendo una gestión eficaz? en definitiva, pensar en un modelo organizativo para la habilitación del espacio que aproveche al máximo nuestros recursos (tiempos, saberes, talleres de oficios etc.), en el cual las obras que se acometan y el mantenimiento del edificio, con todos su interés y sus marrones, sea entendida como un hecho político en sí mismo que necesita de la implicación de todos los tipos de usuarios.
Sobre la intervención concreta en el edificio podremos hablar de cómo potenciar el uso del espacio como lugar público que posibilita y permite la generación de actividades, condiciones, dinámicas y procesos sociales; cómo colaborar con la arquitectura a controlar semejante escala de manera natural; cómo satisfacer las necesidades espaciales de las distintas usuarias (internas, externas, público general); cómo crear las condiciones para que el espacio sea permeable, poroso, flexible y plástico a la multiplicidad de situaciones diversas y singulares que puedan acontecer….
A largo plazo, además de todo lo anterior, se pueden sumar más retos. Solo como apunte, el de crear un espacio de reflexión, debate e investigación sobre la democratización de lo urbano que pueda ayudar a prácticas ligadas a la apropiación, experimentación y generación de espacios de gestión colectiva. Espacio desde el que cuestionar el sistema por medio del cual se hace ciudad, que tanto nos afecta a todas y todos, desde las normativas, el modelo de concesión de licencias y en general la relación con las instituciones públicas (y a partir de ahora en Madrid, también privadas) hasta el modelo jerárquico y desigual de las empresas que intervienen en los procesos de construcción de ciudad (promoción, diseño, construcción) y que tan bien practican la subcontratación y la ley de la comisión, pasando por … todos los asuntos que cada cual, y siempre feliz y colectivamente, pueda proponer.
No nos olvidamos de lo importante de converger y colaborar con otras experiencias, procesos y colectivos que estén trabajando en otras formas críticas de ser y estar en la ciudad.
Bienvenidas todas.